Terapia Humanista

La Terapia Humanista nos invita a explorar nuestro interior para conectar, no solo con lo que pensamos si no también con lo que sentimos, acerca de lo que nos está sucediendo. Y es ahí donde encontramos el impulso y los recursos innatos para solucionarlo, saliendo fortalecidos/as de la experiencia.

Psicoterapia Humanista

La Psicoterapia Humanista basa su práctica en el desarrollo profundo del Ser. Esto significa que, además de tratar directamente los problemas psicopatológicos ( ansiedad, depresión, trauma, etc. ), se refuerzan a la vez aspectos tan importantes para la vida como es la propia identidad, la autoestima o la motivación vital.


Este enfoque humanista parte de la idea de que todas las personas somos “un universo único”. Es decir, que experimentamos los acontecimientos de la vida de un modo distinto y tenemos un camino diferente por recorrer. Por tanto, en sesiones no trabajo con pautas o patrones prefijados, si no que mi intervención se adapta a lo que demandas en consulta y a tus características personales.

Bajo la mirada humanista las personas dejamos de ser solo nuestros traumas del pasado, y nuestros problemas actuales, para ser un todo integrado con distintos planos que interactúan entre sí:

¿Y TÚ QUÉ NIVEL NECESITAS REFORZAR?

Como terapeuta humanista, para mi es fundamental generar en la sesión un espacio de empatía, confianza y apoyo seguro donde te sientas profundamente escuchado/a. Un lugar donde te puedas dar el permiso de compartir tus sentimientos y opiniones abiertamente, libre de juicios y etiquetas.

¿Por qué es eficaz la Terapia Humanista?

Porque te permite conectar con tus propios recursos internos, aliviar tu malestar psicoemocional y redescubrir tu valía personal que quedó dañada tras las dificultades que viviste a lo largo de tu vida.

Beneficios de la Terapia Humanista:

► Favorece tu autoconocimiento y aceptación de quién eres

► Te permite reforzar tu autoestima y tener una mejor opinión de ti

► Facilita la comprensión y manejo de tus reacciones emocionales

► Te sirve de apoyo para transitar momentos de crisis existenciales

► Afianza tu motivación para abrir nuevas etapas vitales…

«El huevo es una metáfora de nuestra fragilidad y el cuidado con el que necesitamos ser tratados/as.
Paralelamente, el huevo representa la valía y el potencial que todo ser humano poseemos.
Y que tras un proceso de crecimiento personal eclosiona, resultando en una nueva versión de nosotros/as mismos/as»

 (Sara Castellanos)

Madrid

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